Necesario. Quizás sería éste el término óptimo para definir la reciente obra del crítico Arturo Reverter. La faceta más conocida por el público en general de este periodista es la de presentador del programa “Ars canendi” en Radio Clásica de Radio Nacional de España. Pero hay que destacar que también realiza una importante labor de investigación que plasma en sus frecuentes artículos publicados en revistas y en sus excelsos trabajos en forma de libro así como participa en comités asesores de festivales de música. Sin duda, hablamos de un especialista del género vocal, en cuanto a la lírica se refiere. Sin embargo, sus conocimientos no se acaban en sus amplias fuentes fonográficas o en las explicaciones teóricas. Es de los pocos profesionales en este ámbito de la ópera que habla con conocimiento de causa y es que, en sus círculos más cercanos, reconoce haber estudiado canto, descubriendo su voz de tenor. De esta forma, cuando se comienza con la lectura de “este sucinto prontuario vocal”, como él mismo lo califica, se percibe con facilidad la sabiduría y el rigor musical con que realiza los análisis de cada parámetro canoro.
El arte del canto. El misterio de la voz desvelado está estructurado en 25 capítulos, con un prefacio y una bibliografía que no tienen desperdicio. Por si esto fuera poco, añade un CD en el que se pueden escuchar numerosas grabaciones de fragmentos de las obras con las que Reverter expone sus apreciaciones sobre las voces que ilustran las clasificaciones o tipos vocales y los diferentes estilos de canto que aborda en su obra. Analiza la terminología concerniente al léxico musical que se encuentra con frecuencia en las partituras operísticas y aborda con claridad temas comprometidos como el pasaje de la voz, inagotable manantial de conflictos entre los estudiosos de la voz, entiéndase por éstos cantantes, maestros de canto, directores de orquesta, musicólogos, otorrinos, foniatras…
La sucesión de los temas en el libro recrea la evolución histórica del arte vocal, incluyendo los condicionantes socio-religiosos que definieron en gran medida los tipos vocales, estilos y repertorios desarrollados hasta la actualidad. Así, podemos encontrar referencias ancestrales a la escuela napolitana de canto, encabezada por Porpora; a los más importantes maestros de canto, como Manuel García, español que se encargó de estrenar, entre otras, El Barbero de Sevilla de Rossini, y cuya formación procede de la escuela antes mencionada y, como no, a relevantes intérpretes de la actualidad, como la soprano rumana Angela Gheorghiu, el barítono malagueño Carlos Álvarez o el bajo alemán Kurt Moll.
En definitiva, una gran obra para un gran género musical. Mi más sincera enhorabuena al autor por un costoso trabajo, producto de tantos años de investigación, donde se pone de manifiesto el buen hacer cotidiano de este periodista en los micrófonos del programa que comparte el nombre con el libro que nos ocupa. Ya sea para legos o para expertos, es un manual imprescindible.