Josefa F. Mora Sánchez1
Resumen. El presente trabajo es una introducción a la figura de Hèlene Smith, nacida como Elise Müller (1861-1929), otro caso pendiente de la Historia del Arte no contada. Se conservan algunos estudios sobre su supuesta triple mediumnidad mientras que la mayoría de sus dibujos y de sus obras pictóricas están en paradero desconocido.
Palabras clave: Art Brut, pintura, Hèlene Smith, Elise Müller, médium
Abstract. This paper is an introduction to the figure of Hèlene Smith, born as Elise Müller (1861-1929), another non included case in the History of Art. Studies that were made are preserved on its so-called triple mediumship, meanwhile most of his drawings and paintings are missing.
Keywords: Art Brut, painting, Hèlene Smith, Elise Müller, medium
Introducción
A finales del siglo xix la intelectualidad centroeuropea empieza a cuestionarse la desvinculación entre el arte y la ciencia. Por una parte, Freud y el psicoanálisis, además de Charcot y la Salpêtrière, contribuyen a sentar las bases de los roles de género actuales. Mientras, los movimientos artísticos de vanguardia buscan atalayas desde las que salvaguardar su territorio, limítrofe con el de otras vanguardias que se van conformando gracias a y en contra de, necesitándose sin remedio y de manera simultánea, oscilando a la misma velocidad en un flujo permanente y sincrónico.
En este contexto histórico complejo y del que aún desconocemos numerosos detalles y entresijos, se pone de moda el espiritismo, un movimiento que se mantendrá con vigor hasta mitad del siglo xx.
El apogeo del espiritismo
Los médicos empiezan a interesarse por el espiritismo a finales del siglo xix a partir de su relación con fenómenos como la hipnosis, la histeria y el sonambulismo, tan relevantes para la historia de diversas disciplinas (la Psiquiatría, la Neurología o la Psicología) en sus intentos de delimitar los ámbitos específicos de actuación y de alcanzar un estatus científico. La publicación en el París de 1889 de la obra de Pierre Janet bajo el nombre de L'Automatisme psychologique. Essai de psychologie expérimentale sur les formes inférieures de l'activité humaine, enteramente dedicado a los actos automáticos o fuera del control consciente, establece un antes y un después en el tema. Por otra parte, desde la Psicología se niega la intervención de los difuntos en estas conductas y se atribuye a un tipo de trance productivo y como consecuencia del desdoblamiento de la personalidad los mensajes y testimonios gráficos resultantes; además se entienden estas manifestaciones como la explosión de la inhibición y el subconsciente. Así, estos testimonios en forma de dibujos, pinturas y relatos se considerarán instrumentos valiosos para la exploración del inconsciente.
De esta forma y en este momento, surgen los primeros intentos de estudio y análisis formal de tales manifestaciones, fenómenos y síntomas, un nuevo corpus analítico reconocido hacia 1900. En 1919 se crea en París el Institut Metapsychique International, cuya repercusión mediática e intelectual revolucionó las reuniones de los salones de la época. Es el momento en el que otros sujetos como Adolf Wölfli crean expectación y se convierten en sujetos de estudio científico2.
Elise Müller
La médium, dibujante, pintora y escritora conocida —aunque muy desconocida— como Hélène Smith, nació en Suiza y su nombre real era Elise Müller (1861-1929). Si hiciésemos un repaso de los antecedentes del arte mediúmnico, no podríamos permitirnos olvidar el indagar en la obra de esta iniciada en el espiritismo por Víctor Hugo.
Elise Müller era empleada en una tienda y se convirtió, a partir de 1892, en un referente del mundo espiritista, cuanto contaba apenas treinta años. Como ya hemos dicho, fue guiada primeramente por el propio Víctor Hugo y después se convierte en discípula de Cagliostro, también conocido como Léopold. Dotada de una triple mediumnidad (clarividente, auditiva y tipológica) demostró asimismo una capacidad notable para el funambulismo. Sus sueños le hacían vivir «aventuras reales» en episodios que, a través de transcripciones, darán lugar a una especie de novelas. Tales «novelas» componen un corpus articulado en diferentes temáticas y ciclos: ciclo extraterrestre, ciclo ultra-extraterrestre, ciclo hindú y ciclo de la realeza. Durante el primer ciclo se constata la invención de un lenguaje y una alfabetización «extraterrestres», además de citas en sánscrito (aunque aparentemente nunca había tenido contacto con este idioma). Llevaba a cabo también dibujos, pero estos no eran fruto de la hipnosis sino de la memoria inmediata tras los periodos de trance en los cuales tenía sus visiones.
Lucienne Peiry, directora de la Collection de l´Art Brut entre 2001 y 2011, escribe en su tesis doctoral, presentada en 1996 en la Universidad de Lausana, sobre la fecundidad artística mediúmnica e introduce el tema con las palabras de un minero de Pas de Calais (Francia) conocido como Augustin Lesage:
C'est en janvier 1912 que de puissants Esprits sont venus se manifester à moi, en m'ordonnant de dessiner et de peindre, ce que je n'avais jamais fait auparavant. N'ayant jamais vu un tube de couleurs, jugez de ma surprise, à cette nouvelle révélation: «Mais, dis-je, j'ignore tout de la peinture. -Ne t'inquiète pas de ce détail insignifiant, me fut-il répondu. C'est nous qui travaillerons avec ta main». J'ai alors reçu, par écriture, les noms des couleurs et des pinceaux qu'il me fallait et j'ai commencé à peindre sous l'influence des artistes planétaires, après que j'étais rentré de la mine, bien exténué de fatigue.3/4
Apreciada por el espiritismo y valorada por el psicoanálisis, Hélène Smith llegó a considerarse una figura fundamental del arte mediúmnico y de la creación automática.
Hélène Smith como sujeto de estudio
Théodore Flournoy (1854-1920), investigador, psicólogo y médico de gran prestigio e influencia en la época y mentor de Jung, se esforzó por demostrar que todas estas producciones automáticas se podían explicar por criptomnesia, es decir, por el resurgimiento de recuerdos olvidados, contradiciendo así la creencia de la propia médium.
Flournoy dejó constancia de las sesiones que presenció a lo largo de cinco años junto a Hélène Smith; como ejemplo, véase el testimonio escrito de la primera de ellas5:
February 16, 1896. – The idea of a special handwriting belonging to the planet Mars occurs for the first time to Hélène’s astonishment in a Martian semi-trance. (...)
August 22. – Hélène for the first time writes in Martian. After various non-Martian visions Mlle. Smith turns away from the window (it rained hard, and the sky was very gray), and exclaims ‘Oh, look, it is all red! Is it already time to go to bed? M. Lemaître, are you there? Do you see how red it is? I see Astané, who is there in that red; I only see his head and the ends of his fingers; he has no robe, and here is the other (Esenale) with him. They both have some letters at the ends of their fingers on a bit of paper. Quick, give me some paper!’ A blank sheet and the pocket-pen are handed to her, which latter she disdainfully throws down. She accepts an ordinary pencil, which she holds in her customary fashion, between her middle and index-finger, then writes from left to right the three first lines of Fig. 216, looking attentively towards the window at her fictitious model before tracing each letter, and adding certain oral notes, according to which there are some words which she sees written in black characters on the three papers—or, more correctly, on three white wands, a sort of narrow cylinder, somewhat flattened out—which Astané, Esenale, and a third personage whose name she does not know but whose description corresponds with that of Pouzé, hold in their right hands.
La publicación de Flournoy es un tratado completo que, a modo de inventario, recoge diferentes episodios creativos de Hélène Smith y que elabora como observador atento y casi siempre honesto; en él recopila no solo los lenguajes —Figura 1—, dibujos —Figura 2— y confesiones que emanan de los ciclos antes mencionados (extraterrestre, ultra-extraterrestre, hindú y de la realeza), sino también cuestiones presentes en la médium y que dieron como resultado capítulos muy intensos. Trata la telepatía, el movimiento de objetos sin contacto, las materializaciones e incluso describe detalladamente a los espíritus con los que Hélène Smith mostraba tener más contacto, como era el caso de una tal Mlle. Vignier o el Curé Burnier, por ejemplo. Los dibujos y las descripciones de Smith, incluidas por Flournoy y que ilustran y completan el libro, son una documentación extraordinaria, pero no parecen constituir en conjunto una obra plástica completa ni sólida; sin embargo más interesantes y peculiares parecen, por su laboriosidad y complejidad, lo que recoge sobre los lenguajes en los que Hélène Smith escribía y se expresaba con soltura. Flournoy llega incluso a descodificar y traducir estos lenguajes, en una labor de antropólogo y lingüista, factible gracias a la presencia y contacto directo con la médium.
Figura 1. Escritura extraterrestre. The Martyan Cycle (fragmento), 1896.
Figura 2. «Casa de Astané» en The Martyan Cycle, 18967.
A lo largo de las sesiones que se incluyen bajo el nombre del ciclo hindú, aunque estas no son lineales en el tiempo, Smith sostiene haber visto Teherán (en una sesión de 1894), y el 14 de abril de 1896 Flournoy recoge como, tras caer en un profundo sueño por el cual acaba llorando, presencia la declaración de amor del príncipe Sivrouka Nayaka en una ciudad llamada Tchandraguiri en Kanara en el año 1401.
El legado
Debido a las declaraciones de Flournoy y al sentirse, por otro lado, incomprendida y manipulada por los círculos espiritualistas ginebrinos, poco a poco se encerró en sí misma y en su fe cristiana. Fruto de este aislamiento son las pinturas que realiza a partir de sus visiones entre 1903 a 1915. Entonces es ella quien documenta paso a paso la evolución de tales obras mediante fotografías de las diferentes fases de ejecución, dejando una especie de testamento tras la realización de estas tablas.
Se negaba a vender las pinturas pero accedió a donarlas, con toda su documentación, al laboratorio de psicología fundado por Flournoy. Las pinturas se reunieron después de su muerte en el Musée d'Art et Histoire de Ginebra. El testamento de la donación fue sin embargo impugnado, los trabajos fueron devueltos a la rama húngara de la familia de su padre y desde entonces han desaparecido, a excepción de dos obras conservadas en el LAM (Lille, Francia) y en la ABCD Collection (Montreuil, Francia) .
Waldemar Deonna (una conocida fotógrafa, historiadora y arqueóloga suiza) publicó en 1932 De la planète Mars en Terre sainte, un amplio estudio donde narra el singular proceso de creación de Hélène Smith, su modo de ejecución, la ausencia de estudios compositivos previos, el orden inusual de los elementos, revelando su creatividad como un modo de visión metódico progresivo y auditivo, pintando el paisaje entero antes de superponer caracteres, detalle tras detalle. Deonna afirmó que la médium era un célebre caso entre «hystérie et glossolalie, écriture automatique et peinture de l’inconscient».
Bibliografía
AA VV. ABCD, une collection d´Art Brut. Arles, Actes Sud‐abcd, 2000.
AA VV. L´Art Brut. Messages et clichés de Jeanne Tripier, Gustav le Démonise, La Fabrique d´Auguste et autres. Publications de la Compagnie de l´Art Brut. Fascicule 8. Lausanne, Collection de l´Art Brut, diciembre 1966.
FLOURNOY, Th. From India to the Planet Mars. A study of a case of somnambulismo with glossolalia. New York/London, Harper and Brothers publishers, 1900.
1
Universidad de Granada, España.
Contacto con la autora: pepamorasanchez@gmail.com
2
GOMEZ, Edward M. «Adolf Wölfli: In the Archives». Raw Vision, vol. 1, nº 18, 1997.
3
PEIRY, Lucienne: De la Clandestinité à la Consécration. Histoire de la Collection de l´Art Brut 1945-1996. Tesis doctoral presentada en la Universidad de Lausanne, 1996. pp. 12-13.
4
Es enero de 1912 cuando unos espíritus poderosos llegaron a manifestarse ante mí, ordenándome que debía dibujar y pintar, cosas que nunca había hecho antes. No había visto nunca un tubo de pintura, aunque hubo una nueva revelación: «pero, digo, no sé nada de pintura. -No te preocupes por este insignificante detalle, respondió, funcionará con la mano». Recibí, por escrito, los nombres de los colores y pinceles que necesitaba y empecé a pintar bajo la influencia de artistas mundiales, después de volver de la mina, muy fatigado [traducción de la autora].
FLOURNOY, Th: From India to the Planet Mars. A study of a case of somnambulismo with glossolalia. Harper and Brothers publishers. Translated by Daniel B. Vermilye. New York/London, 1900. pp. 201-203.
6
En la descripción de la primera sesión, Flournoy refiere como prueba el testimonio de los grafismos de la imagen que corresponde a la referencia que bajo figura 21 presenta en su libro From India to the Planet Mars. A study of a case of somnambulismo with glossolalia. p. 205.
7
Astané, según la información recogida por Flournoy, era para Hélène Smith un exhindú reencarnado en el planeta Marte. Los dibujos están acompañados de una descripción detallada de cómo eran el paisaje marciano y la propia casa.